SI A LOS TRES AÑOS NO HE VUELTO
Hace ya un tiempo, el periodista Ana R. Cañil Ha comenzado para seguirle el campo en una historia terrible: el de los prisioneros de él postguerra del cual el hijo tiene los ser arrebatados para su carceleros para internarlos en seminarios y conventos o darles en adopción. Uno práctica cruel que encontrado su justificación? En teorías pseudocientíficas, limpios de las dietas totalitarios y defendidassin fisuras para doctores, religiosos y reputed legisladores de la época.Aquí tenga asunto para un ensayo magnífico. Pero el autor no ha sido capaz a eschew una aproximación emocional, también a pesar de que qué ha emprendido ya en La mujer del maquis,a pesar de que, en este caso, con ambición más narrativa muchísima. El resultado de su esfuerzo es un imposible novella para aflojar, ningún único para el hecho terrible que denuncia, pero para la manera en aquel este hecho encarna en dos antagonistas inolvidables: Jimena Bartolomé, la mujer joven de un comunista, y María Topete, el director de la prisión de mujeres de Ventas.