LA VIDA INTIMA DE LOS ENCENDEDORES: ANIMISMO EN LA SOCIEDAD ULTRA MODERNA

Málaga de premio de Ensayo 2008 . En el gesto perpetuo –y también simbólico– de aquel el hombre incendia el cigarrillo en la mujer tarde la ficción animista: con es entre los dedos, la señora espera en aquel el mechero literalmente lo incendia. La apología del alma del encendedores butlla en el espíritu por un lado significativo de la humanidad tuvo que adscribir vida en los objetos inanimados. Contra la evidencia científica y el satanización del daño pensado lloró supersticioso, la sociedad contemporánea no acaba para aceptar el exctinction del alma de las cosas, en la misma manera en aquel lo no puede renunciar en los mecanismos defensivos que oferta la ficción, la imaginación, la fe, y el sugestión que, también a pesar de que el animismo, en algún momento ha mostrado su eficacia para sobrellevar la confusión, la tensión, el miedo y la soledad de crecer que provoca el universo material. Delante del impasibilidad de las cosas, el hombre moderno atiende en la ficción animista, de modo que la lógica continúa en ser insuficiente para desentrañar la mayoría de misterios antiguos que aquellos nos despertamos. Si renunciamos en pensar en la divinidad, en la vida de los objetos o en el alma de los animales se quedaría fachada indefensa del asunto inerte. Más pronto aquello acepta la soledad cósmica, la magia pensó del hombre ultramoderno preferir suponer que los objetos son vivos, y así como la consecuencia les trata o maltratarles. Nos resistimos en introducir en una madurez refractaria en el misterio, raíces quietas la idea de aquel el altri no es vidas. Deslindar Las raíces del qué, la razón y el hasta que dónde del avidez animista de la sociedad ultramoderna es qué calienta en el fondo este libro.