EL NIÑO PEZ
PARER DE LEER: Si yo shaft uno critica escoltas del cual manteniendo tanto abundar, escribiría que esto novella es uno abre maestro, pero también a pesar de que sólo soy un editor de bombo pequeño y gracia escasa, me limitará en decir que esto novella cuenta una historia desgarradoramente feliz. Él «desgarrón afectivo» del cual Dámaso hablado Alonso en el caso del El señor Francisco de Quevedo: «el polvo será, pero pulso enamorado». Esta historia está contada por un perro y en un sentido cuenta una vida de perro, más animal que racional. Una chica bien, Lala, que encoña de su criado paraguayo, él Guayi. Y es que cuándo la marcha de pasión afectuosa para modo nosotros ya jabones que es inevitable de perder la prueba y matar y decir adiós en todo esto y en todo aquello y buscar un loch o algunos abreva dónde puede renéixer y bautizar y humedecerse. El autor, que también es filmmaker, ha dirigido la versión cinemática de esta historia. No eres si han leído ya pelarlo pero en cualquier acontecimiento no tiene que cesar vista esto novella. Lo pele ninguna la cuenta el perro (los perros saben para escribir pero no sabe para hacer cine) y que mucho cambio tanto qué nos cuento gustar qué nos cuento con qué nos cuento (no es uno trabalenguas, promesa). De modo que los serviles sumas incapaces humanas de morder la mano de quién da para comer, pero los perros…